Permito que haya un ambiente de confianza para que el alumno sienta la libertad de preguntar cualquier cosa, aunque parezca muy simple, en cualquier momento.

Me interesa conocer la aptitud inicial de la persona así como su objetivo, para establecer un punto inicial y un punto final.

Diseño ejercicios que me sirven de ejemplo y otros que me ayudan a evaluar el aprendizaje de los contenidos. Además, intento que estos ejercicios sean muy creativos, pero sobretodo claros, concisos y reflexivos.

Me adapto al ritmo de aprendizaje del alumno, al tiempo que le enseño técnicas o lo aconsejo respecto a cómo sería conveniente abordar cierto contenido, para así también afectar positivamente su curva de aprendizaje.

Los errores también son bien recibidos y dan cabida a la oportunidad de mejorar las prácticas para el aprendizaje.

Algo muy importante y valioso: me interesa formar en el estudiante la capacidad de buscar soluciones por sí mismo, por lo cual busco enseñarles a aprender.

Muestro al estudiante diferentes usos que podría darle a los contenidos aprendidos; esto con ánimo de que vea el lado práctico del conocimiento y para que vaya formando la motivación e iniciativa de idear sus propios desarrollos, al tiempo que doy vida a su curiosidad.

Para mí es esencial que el estudiante desarrolle su capacidad de análisis para abordar los problemas mediante la lógica y la argumentación, recurriendo muy poco a la memoria, y así sea capaz de diseñar soluciones estructuradas de forma clara e incluso sencilla. ¡Divide y vencerás!

Siempre busco tener una actitud positiva para formar un espacio agradable.