Dar clases y compartir mis conocimientos siempre ha sido una de mis pasiones. Busco dar una perspectiva de las matemáticas de manera divertida de tal forma que los alumnos puedan relacionarla con el mundo real. El contenido de las clases se ajusta a las necesidades del alumno y la dinámica de ellas es que yo explico lo más detalladamente posible los temas pero al mismo tiempo siempre estoy buscando la intervención de los estudiantes mediante ejercicios y ejemplos que fomenten la interacción y retroalimentación del contenido. En mi experiencia en muchas de las ocasiones el rechazo a las matemáticas proviene de la idea errónea que se tiene de las mismas, ya sea por algún profesor poco flexible, temas incomprendidos o por los dichos habituales que únicamente relacionan a las matemáticas con números y ecuaciones las cuales se deben resolver de manera sistemática; si bien como parte de los planes de estudio de las escuelas se busca que los alumnos tengan habilidades numéricas específicas, las matemáticas van más allá de ser metódicas, desde un enfoque donde se le incite al alumno a pensar en distintas posibilidades y a salir de la caja es posible hacer del estudio matemático un placer de diversión. Disfruto mucho de compartir y aprender juntos es por eso que en mí no verán al clásico profesor impositor sino más bien intento ser una guía de apoyo brindando el mayor número de herramientas que estén a mi alcance, escuchando las inquietudes y propuestas de los estudiantes pero principalmente generando conocimiento que perdure para toda la vida y no simplemente para aprobar un examen o una materia.