Tengo 21 años. Las matemáticas son simples pero son dichas de forma complicada. Creo que cada uno de nosotros lleva algo de especial y único, es por eso, que cada uno aprende de forma diferente. Comprende diferente. Adaptarse a cada uno de ustedes es esencial para mi. En eso radican los problemas de aprendizaje en las escuelas, en las aulas. Tratando de meter a todos en un molde, y, no todos enc...
Tengo 21 años. Las matemáticas son simples pero son dichas de forma complicada. Creo que cada uno de nosotros lleva algo de especial y único, es por eso, que cada uno aprende de forma diferente. Comprende diferente. Adaptarse a cada uno de ustedes es esencial para mi. En eso radican los problemas de aprendizaje en las escuelas, en las aulas. Tratando de meter a todos en un molde, y, no todos encajan el. Sin embargo, no les culpo. Sencillamente, no se tiene el tiempo o el personal para tratar a cada uno conforme a las aptitudes, destrezas, etc.., de cada uno.
La mejor forma de enseñar a alguien es, primero, hacer que adquiera cierto interés en lo que se le quiere enseñar. Luego, es hacer de la enseñanza algo entretenido, dinámico y didáctico. Esto se logra a través de ejercicios repetitivos, de incentivos y de imágenes recreativas, citando ejemplos prácticos. De esa forma se vuelve mas accesible la enseñanza. Mas atractiva. Me hubiese gustado que alguien me enseñara de esta forma las matemáticas. Pues como bien dice una celebre frase, las matemáticas son el lenguaje de Dios. Hay que tratarlas de acuerdo al respeto y cariño que merecen. Si bien, no todo lo que se enseña puede servirnos de forma practica y cotidiana. Si puede darnos el beneficio del entendimiento, de cómo es que funciona el bello mundo en el que vivimos. Así que, ven y aprendamos juntos.