En las clases de canto se aprende a controlar la respiración, la emisión de sonido, la afinación y el ritmo en una pieza musical.

La voz además de ser un instrumento que llevamos con nosotros y construimos todos los días ayuda a expresar sentimientos y convencer con la palabra a los espectadores, por dicho motivo se trabaja en cada sesión con el análisis interpretativo de cada pieza.