No es lo mismo ser violinista que ser profesor, aunque todos han sido alumnos y siempre podemos recordar el método que usaron los profesores. No es lo mismo conocerlo que aplicarlo. La paciencia en un profesor de violín es básica.
La técnica para tocar el violín es bastante compleja y llegar a dominarla son horas y horas de práctica. El alumno tiene que trabajar por su cuenta, pero tenemos que...
No es lo mismo ser violinista que ser profesor, aunque todos han sido alumnos y siempre podemos recordar el método que usaron los profesores. No es lo mismo conocerlo que aplicarlo. La paciencia en un profesor de violín es básica.
La técnica para tocar el violín es bastante compleja y llegar a dominarla son horas y horas de práctica. El alumno tiene que trabajar por su cuenta, pero tenemos que estar preparados para clases enteras repitiendo lo mismo una y otra vez hasta que domine la técnica.
Además tendremos que hacerlo de una forma entretenida o nuestro alumno acabará rindiéndose, sobre todo si trabajamos con niños pequeños. Desafortunadamente la experiencia es lo único que crea un método que funcione, pero mientras tanto, escucha a tus alumnos y abre la mente
Consejos previos
Antes de empezar a dar cualquier clase con una persona que quiera aprender violín tenemos que tener en cuenta si el alumno parte de cero. Si es así siempre es recomendable unos consejos previos y deja claro algunas dudas frecuentes.
¿Cuántas horas necesito practicar al día?
¿Qué violín comprar?
¿Cuánto tiempo tardaré en aprender?
Cada profesor tiene su propia respuesta a estas preguntas, pero lo ideal es personalizar a las respuestas según la necesidad de cada alumno. No todos los alumnos necesitan las mismas horas, el mismo violín y tardan el mismo tiempo en aprender. Hay muchas formas de aprender a tocar el violín, empezar tocando y familiarizándose con el instrumento es una de las más los conservatorios siempre se empieza por la teoría y el solfeo. Pero si quieres enseñar a personas que aprenden por gusto o a niños, debes dejarles tocar el instrumento.
Es una buena forma de enganchar, ten en cuenta que acaban de comprarse un violín y que quieren empezar a tocarlo. La técnica del violín es complicada para aquél que no lo ha usado nunca así que tardarán mucho en pillarlo.
Empieza enseñando algunos ejercicios sencillos, como escalas o canciones muy simples que le hagan mover los dedos, pulsar las cuerdas y dominar el arco. Así verá cómo avanza clase a clase y genera sonidos agradables. Mantén siempre a tu alumno motivado.