Considero que el mundo de las matemáticas ofrece una gran oportunidad para completar el proceso de formación debido a que estimulan la capacidad de análisis, de abstracción y de razonamiento. Dentro de mis clases pretendo estimular lo anterior mediante un avance progresivo de ejercicios y con una forma simple y sin complicaciones retóricas o de poses falsas para entonces crear una atmósfera ideal para el desarrollo de la materia.
Estoy convencido de que de nada sirve resolver 25 ejercicios iguales de álgebra o geometría análitica, hay que ir progresando en la complejidad hasta que se conviertan en un reto para mis alumnos porque en mi experiencia he visto casos de estudiantes que realmente se "emocionan" al ir resolviendo uno y otro; ¿Cuál es la clave? Simplemente "creer que uno no se la cree tanto" y pasar un buen rato en el aprendizaje de las matemáticas en un ambiente sin tensión ni estrés.
Siempre he creído que las matemáticas se han abordado, en ocasiones, de forma equivocada por parte de los sistemas educativos; se nos pide a los maestros que "apliquemos" los problemas a la vida cotidiana, y proponemos problemas de huertitos y hortalizas o de venta de quien sabe que cosas, y siempre me he preguntado ¿Alguno de los de aquí pensará tener un huertito? Yo prefiero estimular la capacidad de razonamiento que dan las matemáticas para aplicaciones REALMENTE de la vida cotidiana como desarrollar una mejor estructura de pensamiento( aplicable en cualquier ámbito) e incluso desarrollar una buena capacidad de conversación; y voy más lejos, tener un buen nivel de expresión ante la chica o el chico que nos agrada. Aunque no lo creas esto y más te ofrece un buen desarrollo de las matemáticas, y es lo que siempre pretendo obtener en mis clases.