La física puedes ser algo más que una asignatura complicada y difícil de entender, puede llegar a ser entretenida e incluso divertida, si le damos la oportunidad de verla como algo más que ecuaciones y fórmulas que se necesitan aprender de memoria para resolver un problema. La física es la comprensión de los sucesos naturales, pero también es la ciencia que explica mucho de los eventos cotidianos a lo largo del día y que da respuesta a muchas preguntas.
A lo largo de mi experiencia, he observado que hay un gran rechazo hacia la física por la juventud, algunos por complicada, otros por malas enseñanzas, pero lo que he aprendido es que hay mejores métodos para crear curiosidad en los jóvenes, ayudándolos a mejorar su comprensión sobre los fenómenos físicos y agudizando su capacidad de razonamiento.
Hay mucha física en todo lo que nos rodea y la podemos plantear al realizar preguntas, por ejemplo: ¿por qué se genera el sonido "tss" al abrir una lata de soda? ¿Cómo funciona el interruptor de la luz? ¿Cómo logramos respirar? ¿Por qué el cielo es azul? ¿Por qué existe la noche y el día? Todas éstas y más preguntas tienen su respuesta en la física, algunas serán fáciles de responder y otras requieren de explicaciones más avanzadas y un dominio más profundo de la física, pero al resolver las primeras y más básicas preguntas, podremos construir un razonamiento lógico que el alumno podrá utilizar sin recurrir a complicadas fórmulas, y lo más importante, no se negará al reto de pensar en una respuesta.