Me considero una persona pro activa, decidida, inteligente y responsable. Tengo espíritu aventurero y trabajador y me gusta asumir desafíos. Nunca dejo de aprender.
Mi pasión es enseñar.
Desde que empecé a dar clases, poco a poco fui descubriendo algo que no sabía.
Paso a paso descubrí que me apasiona enseñar matemáticas, y con cada problema matemático nuevo que ponía en práctica con mis alu...
Me considero una persona pro activa, decidida, inteligente y responsable. Tengo espíritu aventurero y trabajador y me gusta asumir desafíos. Nunca dejo de aprender.
Mi pasión es enseñar.
Desde que empecé a dar clases, poco a poco fui descubriendo algo que no sabía.
Paso a paso descubrí que me apasiona enseñar matemáticas, y con cada problema matemático nuevo que ponía en práctica con mis alumnos me sentía ilusionada, y podía ver que ellos se llenaban de satisfacción al poder resolverlos.
Descubrí lo interesante que puede ser la enseñanza de licencias matemáticas, ya que un día ideaba un ejercicio y podía ponerlo en práctica al día siguiente, ver si funcionaba y ver cómo los alumnos trabajaban con artificios matemáticos.
Me considero muy afortunada porque trabajo en aquello que más me gusta. Esto no significa que ya lo tenga todo hecho en la vida, ni mucho menos. En mi opinión significa justamente todo lo contrario, que queda mucho que hacer. Por ello, siempre estoy buscando nuevas fórmulas para que mis alumnos aprendan y disfruten de la matemáticas en lugar de tenerle miedo.
Todo esto se consigue con gran esfuerzo mantenido a lo largo del tiempo, sumando día a día, creciendo milímetro a milímetro.
Por lo tanto, la satisfacción personal es la suma del trabajo mantenido, el esfuerzo y la pasión por lo qué haces.
Agradezco infinitamente a Dios por darme el don del entendimiento y de la enseñanza también agradezco a mis padres por apoyarme incondicionalmente en todos los proyectos que he emprendido.