FORMACIÓN PRESENCIAL
La imagen del formador (instructor, tutor, maestro, llámese como se quiera) que tenemos en mente, aún a día de hoy, es la de una persona que está delante de la pizarra, explicando lo que aparece por el proyector, mostrándote al lado tuya cómo realizar tal o cuál cosa. En definitiva, una persona que ves y con la que actúas directamente de tú a tú.
Después de más de 20 años formando en nuevas tecnologías, especialmente todo lo que es programación con herramientas de software libre, hace que piense en 3 cosas por las cuáles los potenciales alumnos prefieren la formación presencial:
- Confianza. Ofrece más confianza aquella persona que ves delante de ti. Lo oyes, puedes hablarle directamente, le puedes mostrar fácilmente lo que estás haciendo, cuáles son tus dudas, etc.
- La materia a conocer no se presta fácilmente para otro tipo de formación. Ejemplo: un curso de carpintería de la madera, donde el formador nos puede guiar viendo el mueble que está construyendo el alumno para mostrar posibles técnicas con las que mejorar.
- Costumbre. Es la forma en que se ha formado desde tiempos inmemoriales hasta la actualidad. Es muy complicado cambiar esto porque en el fondo radica el primero de los factores: CONFIANZA.
Sin embargo, existen desventajas en esta manera de impartir clases: horarios muy concretos, duración de la clase limitada, posibles desplazamientos y en definitiva, necesidad de más tiempo, recursos y dinero a lo que sumarla incomodidad.
FORMACIÓN ONLINE
No es nueva. Lleva años con nosotros y, a pesar de que sus seguidores han ido aumentando al tiempo que sus posibilidades con nuevas herramientas, tecnologías, etc., aún, la gran mayoría de la gente prefiere la clase presencial de toda la vida.
Se utilizan las redes sociales de manera masiva, se realizan numerosos trámites online, etc., pero nos sentimos incómodos en una formación online.
Desde el 2000 comencé a impartir también clases online. Comenzó a extenderse el uso de la Web y podía poner a disposición de mis alumnos 24 horas/365 días al año, recursos educativos y contactar con ellos por correo electrónico y teléfono. Se aclaraban dudas, se enviaban ejercicios, prácticas, etc., y por supuesto se resolvían. Tuve a mis primeros alumnos internacionales.
Aparecieron los foros y chats que supusieron una mejora tremenda. Podíamos prescindir del teléfono si así se deseaba. Podía comunicarme fluídamente con mis alumnos, facilitar explicaciones, correcciones, de todo. Podías impartir una lección por chat a un grupo de alumnos, de una manera que comenzaba a acercarse al formato presencial. He llegado a tener hasta a 150 alumnos en una clase de esta forma, aunque, ojo, lógicamente no es lo recomendable y se han de seguir normas de comunicación bastante estrictas para que no se convierta en una locura.
Y de entonces hasta la fecha actual: presentaciones interactivas, ejercicios interactivos, colaboración entre alumnos, mostrar e interactuar con los alumnos como si estuvieras al lado, videoconferencia que permite ver a los alumnos y al formador, si se quiere o bien, solamente hablar a través de auriculares (adiós teléfono si se desea) y podríamos seguir.
Las herramientas para conseguir todo esto son las redes sociales, los chats, foros, programas de videoconferencia, pizarras compartidas, escritorios compartidos, vídeos y más.
VENTAJAS DE LAS CLASES ONLINE:
Las ventajas son evidentes:
- Tenemos todas las ventajas de las clases presenciales.
- Las posibilidades de colaboración entre diferentes alumnos se dispara (y obtienen más canales para aprender y retener lo aprendido).
- Mejora la comunicación con el formador.
- Disponibilidad 24 horas de los recursos de formación.
- No son necesarios desplazamientos.
- Se abarata el precio de la hora formativa.
- Da la posibilidad de formarse a personas que de otra manera no podrían o tendrían muchas dificultades.
Espero que este artículo ofrezca una visión más cercana a la realidad sobre lo que es la formación online. Un cordial saludo.