Para muchos alumnos que quieren aprender música, una de las cosas más difíciles que pueden encontrar dentro de la materia de lenguaje musical, es el solfeo. Ya que representa y pone a prueba el conocimiento que el alumno tenga sobre:
- Teoría musical
- Lectura en pentagrama
- Ritmo
- Quironimia
- Entonación
Sin embargo, el principal aspecto que representa una gran dificultad en el solfeo es la entonación. Aún más, muchos alumnos tienen problemas con la entonación porque creen que tienen que saber de canto o tener una voz musical.
En efecto, cuando el alumno mezcla todas estas clases de problemas ligado al hecho que debe tener en cuenta todo lo mencionado anteriormente, el solfeo se convierte entonces en un terrible cataclismo. Lo sé muy bien, porque yo también tuve este tipo de experiencias cuando comencé a estudiar solfeo.
Al respecto conviene añadir que, no se necesita tener una voz musical o melódica, ni siquiera es necesario tener una entonación exacta y precisa al momento de iniciar con el solfeo.
Pues el oído musical de cada persona es diferente y este va a desarrollarse de manera rápida o paulatina, dependiendo de la práctica y constancia que el alumno disponga. De igual manera, yo tuve muchas dificultades con la entonación al principio.
Por eso, puedo decir con toda la certeza y veracidad que el alumno, en la medida que practique, irá desarrollando la memoria musical de los sonidos. De este modo al momento de solfear le será cada vez más fácil.
Consejos para aprender solfeo
Entonces ¿Qué consejos para aprender solfeo puedo ofrecer? Basado en mi experiencia, lo que recomiendo es lo siguiente:
- Tener un conocimiento básico sobre la teoría musical, que debe incluir; conocimiento sobre signos empleados en la música, valores relativos, compases, alteraciones y semitonos.
- Lectura rápida y precisa en el pentagrama en clave de Sol (3ºlínea) y Fa (4º línea).
- Adiestramiento de los tiempos con la quironimia, esta forma facilita mucho al momento de las ligaduras de extensión, y a llevar el tiempo preciso y conciso (con o sin metrónomo).
- Realizar una lectura detalla y hablada sin entonación. Para memorizar primero las notas con el ritmo.
- Finalmente, acompañar el estudio practicado y memorizado con la entonación.
Como ya se ha mencionado, este tipo de pasos ayuda mucho al momento de aprender una pieza de solfeo. Asimismo, se puede utilizar programas como Sibelius para aprender de una forma más rápida y efectiva. Yo utilice mucho este programa para aprender de manera rápida piezas de solfeo, ya que tenía que estudiar varios estudios de solfeo y entregarlos en poco tiempo.
Cabe acotar, que otra forma práctica de estudiar solfeo, es utilizar el piano o teclado para la entonación. No obstante, en este aspecto el alumno debe tener cierto conocimiento del piano para reconocer las notas en el mismo.
De otro modo, en el caso del solfeo para niños, estos pueden utilizar la flauta dulce para trabajar de una manera un poco más dinámica y efectiva el solfeo. Ya que el niño al leer y tocar el estudio con la flauta, está ejecutando de una manera inconsciente todo lo mencionado anteriormente. Luego de tocar con la flauta dulce, la melodía queda grabada en su memoria musical y puede cantarla sin ninguna dificultad.
En conclusión, la mejor forma para aprender solfeo es la dedicación y la forma más cómoda para el alumno. Todos tienen una forma diferente y variada de aprender. Por consiguiente, mientras más práctica y relajada sea para el alumno, tendrá más posibilidades de aprender de manera rápida y efectiva.