He notado muchas veces que la mayoría de problemas en matemáticas de estudiantes de educación media (colegio) y universidad aparecen porque no hay un orden de ideas en la solución de problemas matemáticos. Las fórmulas, ecuaciones, diagramas y gráficos aparecen casi al azar. Eso sin contar que casi nunca hay una explicación breve de porque usan ciertas fórmulas o la discusión de casos especiales.
En el caso de la escritura de fórmulas, ecuaciones, expresiones matemáticas y sistemas de ecuaciones hay el problema muy común de no escribir en línea recta. Incluso las líneas de fracción no están alineadas, lo que ocasiona dificultad en hacer simplifaciones de fracciones. Similarmente, cuando no hay una diferencia de tamaño en la escritura de números o letras con sus exponentes; ocasiona problemas al hacer simples operaciones como sumar o multiplicar. Con respecto a lo anterior, incluso la mala caligrafía ocasiona la distinción difícil de números y letras; es fácil ver que en este caso uno no sabe literalmente que está escribiendo en matemáticas, en especial cuando la escritura es al apuro.
Cuando uno habla de hacer buenos gráficos, diagramas, tablas, y mapas mentales es porque ayudan a organizar claramente las ideas en la mente. La mayoría de estudiantes no los hace por pereza, no saber, o por que simplemente no le encuantran utilidad. De hecho, esto es una desventaja que los estudiantes se hacen a ellos mismos porque aún necesitan aprender visualmente en la mayoría de casos. Una ayuda gráfica incluso da ideas para escoger unas cuantas fórmulas que pueden resultar útiles de entre las decenas de fórmulas posibles.
La parte menos hablada de todas es que los estudiantes no quieren poner una explicación breve de porque han escogido sus ecuaciones o fórmulas. Esta es la peor forma de avanzar en el curso porque no encuentran materiales de estudio en sus propios escritos de soluciones de problemas matemáticos. Muchas veces ya no recuerdan la estrategia que usaron para resolver el problema.
Para preparase para un examen final, tener una colección de problemas resueltos escritos ordenados, con ayuda gráfica y explicaciones breves es una ventaja en tiempo de estudio principalmente. De esta forma, los estudiantes tienen una base para intentar resolver problemas más complicados que probablemente aparecerían en el examen final.